El año de Hidalgo por Laura Zita

«Patrioterías»

El año de Hidalgo

Por: Laura Zita

En estas patrioterías, no sé por dónde empezar. Varias ideas me están dando vueltas en la cabeza. Por una parte, me tiene impresionada la salida de nuestro maravilloso presidente. Termina el sexenio con un avión presidencia digno de un príncipe árabe, mientras que la población sufre los constantes aumentos en la gasolina y la canasta básica.

Por otra parte, todos los mexicanos estamos esperando que un puñado de políticos decidan el futuro de nuestro país. Yo, como muchos otros mexicanos dentro y fuera del país, no puedo hacerme a la idea de que todo está perdido y que “ya veremos en 6 años”.

Mi papá decía que el último año de los presidentes y gobernadores era el año de Hidalgo –Chingue a su madre el que deje algo- y todos los políticos, desde los puestos más altos hasta los presidentes municipales de las comunidades más pequeñas, durante este tiempo se dedicaban a hacer “obras interminables”, mejoras innecesarias y demás trabajos sucios para embolsarse una lana antes de perder el “hueso” (puesto político).

Este fin de sexenio está marcado por el descontento de la población, así como por la decepción y la desesperanza. Sin embargo, esos mismos sentimientos son los que nos congelan en la no-acción. Frases como: “siempre es lo mismo”, “nada va a cambiar” nos dan un consuelo falso y mediocre de que hay “otros” que van a mejorar las cosas, “otros” que llegarán como brillantes caballeros y nos salvarán y como no llegan solo confirmamos nuestra triste creencia de “no hay nada que podamos hacer”.

Pero no es verdad, hace algunas semanas Soriana tenía pérdidas millonarias porque la población se negaba a comprar ahí porque habían ayudado en la compra de votos. Hoy el huevo y los lácteos suben de precio y los productos de la canasta básica empiezan a convertirse en artículos de lujo.

La población, aun cuando no lo quiera reconocer, tiene el poder. Mexicanos, no compremos de las grandes transnacionales, ni productos de importación, compremos al productor local que hace un gran esfuerzo por no desparecer en la corriente de las grandes tiendas y de la producción masiva.

Nosotros, los consumidores, somos los que determinamos la oferta y la demanda. Si no compras productos caros y de mala calidad, éstos tendrán que bajar y mejorar su calidad. Los consumidores somos quienes tenemos la decisión de compra. Di no a los productos de importación de mala calidad que le restan mercado a nuestros productores nacionales.

No existe nada mejor que unos suaves y cómodos zapatos de piel de León, ni unas fresas más deliciosas que las de Irapuato, ni nada brilla con más elegancia que la plata de Taxco, ni hay mejor pulque que el de Hidalgo, entre miles de ejemplos de productos nacionales que destacan por la calidad de sus ingredientes y su elaboración.

Ejerce tu poder de comprar y de elegir el producto que más te guste y satisfaga tus necesidades.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s